Por eso volveré a escribir y compartir mis ideas, mis experiencias y mis anhelos, en la esperanza de aportar con un granito de arena a que otro más vez la luz al final del túnel y puedan, como yo, avanzar.
Quienes pierden un hijo, no siempre pueden encontrar quien entienda su dolor, su desconcierto, su vacío. Este espacio está a disposición de quienes han pasado por una experiencia así o de quienes deben acompañar a un padre o madre que lo está haciendo. Tal vez mi experiencia y la de mi esposo, al pasar por ese trance, pueda ser útil a otros para darle un sentido a la pena, a la pérdida, y así hallar una salida al final de ese largo y oscuro túnel...
viernes, 7 de febrero de 2025
Volviendo
Hace mucho que no escribo en este blog. Como le debe pasar a muchos, las necesidades de la vida cotidiana, el trabajo y los pequeños retos del día a día me fueron absorbiendo, y hoy me dos cuenta del tiempo transcurrido, lo que lamento. No he olvidado ni por un segundo este espacio ni la razón por la que fue creado. Sin embargo, también me siento un poco desubicada pues no sé por dónde comenzar o sobre qué escribir, pues mi vida ha avanzado (afortunadamente) y han cambiado muchas cosas desde la última vez que publiqué un post aquí. Por todo ello trataré de reanudar esta práctica esperando que pueda ser de utilidad para otras personas, y aunque mi momento más horrible y oscuro está ya muy lejos, no dejo de recordar clara y profundamente lo que eso significó y significa en mi vida, la forma como me cambió, y lo que pueden estar sintiendo otras personas que estén sufriendo el mismo dolor tal vez pasen por aquí.
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